Esta mañana he comprobado que algunas de las "joyitas" se han escapado.

Presurosas, han iniciado la subida hacia el castillo por las "tropecientas" escaleras de Santa Bárbara, poco a poco, peldaño a peldaño.

Una vez arriba, alguna más turista que otra, se fotografió junto a la Torre de Santa María,  hermosa vista!

Después han llegado arriba, al patio de armas y triunfantes han saludado  a sus eternas y centenarias amigas las piedras de la Torre del Homenaje.

Dicen que no quieren bajar.